La llegada de octubre supone el fin del verano y de las vacaciones. Sin embargo, ¿hay que esperarse a la llegada de la primavera para intentar volver a ponerse en forma y así poder lucir “tipin” con el bañador y el bikini? No, también hay que tonificar el cuerpo, porque tiene muchos beneficios para la salud.
Puedes tonificar tu cuerpo en casa
Es cierto que cada vez hay más gimnasios en las ciudades. Sin embargo, ¿por qué gastarse el dinero en uno cuando puedes tonificar tu cuerpo tranquilamente en tu casa con una serie de ejercicios? Solo tienes que seguir una serie de pasos con unos ejercicios sencillos y verás lo bien que te vienen.
Lo primero de todo es calentar durante al menos cinco minutos. Mucha gente se salta esta parte, pero es de lo más importante que sea lo primero que hagas antes de empezar a hacer ejercicios, ya que el calentamiento te ayuda a evitar lesiones y a rendir más. Trota un poco o sal al portal para subir y bajar las escaleras a una velocidad moderada, iniciando así la tonificación del tren inferior al mismo tiempo que haces cardio.
Habiendo calentado ya, ha llegado el momento de hacer ejercicios, comenzado por un step para tus piernas y glúteos. Con un escalón, un banco o incluso una estantería baja puedes hacer este ejercicio, subiendo la pierna dominante y luego la otra. Luego baja de la misma manera. Para evitar la tensión, tienes que mantener la espalda tan recta como te sea posible.
Seguidamente ha llegado el momento de calentar muslos y piernas, para lo cuál vas a utilizar una almohada y la cama. Pone en posición supina (boca arriba), con los tobillos sobre una silla y apoyando el cuello en la almohada. Pon tus manos en el pecho y sube los glúteos tanto como te sea posible. Cuando hagas unas 10 repeticiones, cambia de posición y apoya los brazos sobre la silla. En este caso tienes que elevar la pierna hacía atrás y luego la otra, durante 25 repeticiones.
Tener unas pesas en casa es muy importante para tonificar el cuerpo. Puedes hacer diferentes repeticiones en tu banco de pesas, de pie o tumbado. Acuérdate de contar con unos buenos guantes para levantar pesas, ya que te puedes dañar mucho las palmas de las manos durante tus ejercicios.
Seguidamente llegó el momento de trabajar con los gemelos. Lo ideal es contar con una mesa que te sirva como soporte, colocando las manos en la misma. Pone de puntillas con un pie y sube la otra pierna, flexionándola hasta conseguir un ángulo recto. Repite esto 25 veces con cada pierna.
Los muslos también hay que trabajarlos un poco, y para eso hay un ejercicio que es muy sencillo, al mismo tiempo que divertido. Abre las piernas y lleva tu peso de un lado a otro. Un ejercicio ameno que si se hace con música puede hasta resultar una danza bastante particular.
¿Terminado? Toca poner en forma los abdominales, para lo cuál es bueno tener una silla como punto de apoyo. Túmbate en el suelo y pon las piernas sobre las sillas, asegurándote que estén bien apoyadas, hasta las rodillas. Sube el torso con mucho cuidado, haciendo fuerza en la zona abdominal y no en el cuello.
Con todo esto ya tienes una serie de ejercicios muy completos para poder tonificar tu cuerpo. Cada día, hazlo cuando regreses del trabajo. De ese modo verás como te sientes mucho más relajado, pues se ha demostrado que tonificando tu cuerpo ayudas a eliminar el estrés y tensión de tu cuerpo.