Elogiadas y elegidas por todo el mundo, las playas de Australia son el destino ideal de todo turista que desea conocer un paisaje hermoso en todo el sentido de la palabra. El color de sus aguas cristalinas y la claridad de su arena transportan a todos sus visitantes a un lugar paradisíaco, lo que provoca que muchas veces se olviden o no tengan en cuenta los peligros que estas playas pueden tener.
Los tiburones y las medusas son algunos de los animales acuáticos más temidos por los nativos de Australia que conocen el peligro y el riesgo que produce meterse en el agua incluso cuando no está recomendado. Las medusas principalmente suponen un gran peligro para aquellos que se atreven a practicar deportes acuáticos como el snorkel y el buceo, ya que se pueden encontrar en las profundidades del agua.
Los tiburones por su parte resultan más peligrosos incluso para aquellos que no se adentran mucho en el mar, surfistas y simples turistas nadando en sus aguas pueden convertirse en victimas de estos feroces animales. Los no tan nombrados pero no menos peligrosos son los cocodrilos de aguas saladas, estos animales pueden encontrarse en estanques y ríos y pueden resultar peligrosos para aquellos turistas que desconocen su presencia y desprevenidos quieren darse un rápido baño en las aguas.
También existen algunos animales mortales que tienen menos probabilidades de cruzarse en el camino de los visitantes pero no por eso pueden dejar de nombrarse: como el pulpo -anillo azul, el pez piedra y la telaraña túnel.