Las noches en Ibiza ya empiezan a ser más fresquitas, y el cambio de ritmo que conlleva la temporada baja ya se deja notar. Pero ¡ojo!, sólo es un cambio de ritmo, no quiere decir que Ibiza no siga ahí, latiendo y descansando de los excesos del verano, ni que esta otra Ibiza, calmada y relajada, no sea la favorita para muchos, tanto visitantes como residentes.
Una de las cosas que continua viva en la isla tras la vorágine estival, es el Mercadillo de Invierno de Las Dalias, con sus más de 100 puestos de ropa, artesanías, artículos de decoración, bisuterías, música y diferentes espacios para comer o beber algo.
El primer sábado de noviembre da comienzo el Mercadillo de Invierno de Las Dalias, para transformarse en diciembre en el Mercadillo de Navidad, donde este, ya de por sí, mágico, bohemio y alternativo mercadillo, se convierte en un lugar que parece haber salido de un cuento de las Mil y una Noches.
El ambiente, tanto en el Mercadillo de Invierno como en el Mercadillo de Navidad, es inmejorable. El aire se impregna de navidad, pero es una navidad un tanto distinta… Aternativa, diría yo. Gentes variopintas abarrotan este pintoresco mercadillo en busca de tesoros: ropa, artículos exóticos, artesanía diversa, libros cuyas hojas viciadas demuestran que han sido leídas antes…
En la barra de la sala podrás degustar el glüwein, vino caliente con especias al estilo alemán, ideal para calentar los ánimos, y en el restaurante encontrarás platos tradicionales propios de la época, además de su oferta habitual de platos exóticos. También suele haber música en vivo para amenizar y mejorar, si cabe, la atmósfera y la buena onda.
El Mercadillo de Navidad finaliza el 3 de enero, pero Las Dalias no cierra sus puertas, pues reanuda su Mercadillo de Invierno que enlaza su fin con el comienzo del Mercadillo de Verano. Así ya sabéis para cuándo reservar vuestros vuelos baratos a Ibiza.
No dejes de visitar el mercadillo más emblemático y carismático de toda la isla.