La Sección Segunda de la Audiencia de Palma juzga a un hombre acusado de saltarse una orden de alejamiento sobre su expareja, agredir a ésta sexualmente y retenerla en su vivienda en contra de su voluntad.
Según el escrito de la Fiscalía, los hechos se remontan a enero, cuando el acusado se encontró con su expareja en una calle de Ciudadela, a quien agarró del brazo y obligó a acompañarle hasta su domicilio.
De acuerdo con el fiscal, en el domicilio, el hombre la obligó a mantener relaciones sexuales, “con absoluto desprecio a su expareja como mujer y con ánimo de posesión y dominación sobre ella”. Además, comenzó a agredirla con un objeto punzante, la agarró del cuello con las manos y la golpeó con el puño en un ojo.
Tras esto, el acusado supuestamente impidió a su expareja abandonar su domicilio durante cuatro días, cerró todas las puertas y ventanas, y la obligó a mantener relaciones sexuales hasta en cuatro ocasiones.
Finalmente, según la Fiscalía, la mujer convenció al acusado para que la acompañase al Centro de la Donna. Allí, con la excusa de ir al servicio, entregó una nota a la trabajadora del centro pidiéndole auxilio.
La Fiscalía acusa al hombre de un delito de agresión sexual, delito continuado de agresión sexual, delito de detención ilegal, delito de agresiones en el ámbito de la violencia de género y delito de quebrantamiento de medida cautelar.
Por todo ello, reclama 40 años y nueve meses de prisión para el hombre, la medida de libertad vigilada durante cinco años, así como la prohibición de acercarse y comunicarse con su expareja.
