Tenerife es uno de los destinos de muchas personas que quieren vivir una experiencia única porque en ella vas a encontrar un lima, personas y sobre todo entorno que te dejarán sin habla, y con las cuales vas a disfrutar como un enano. Una vez que llegas allí no sabrás dónde ir primero de tantos lugares hermosos como tienes para ir pero lo que sí es seguro es que tendrás que ir a algún sitio y, si bien puedes haber elegido, ¿has oído hablar del paisaje lunar de Tenerife? Ese lugar sin duda te dejará que no puedes articular palabra.
El paisaje lunar
Partamos de que Tenerife es como si fuera un continente en miniatura. Tiene muchísimas zonas, barrios o distritos, como quieras llamarlo y aunque no sea muy grande de extensión, lo cierto es que bien se asemeja a cualquier continente único. Pero, sigamos, y hablemos del paisaje lunar porque no, no quiere decir que vayamos a llevarte a la Luna desde Tenerife, ni tampoco que vayas a coger un telescopio y observar allí la Luna, cosa que se podría hacer por cierto.
De lo que se trata es de que descubras un lugar que, tras las explosiones volcánicas, erosión y demás accidentes de la naturaleza, han formado un paisaje con formaciones extrañas que atrae a millones de turistas al año y que es como si realmente estuvieras en la luna, de ahí su nombre.
No es un lugar aislado, hay varias zonas. Por ejemplo, tienes un poco de este paisaje en el Parque Nacional del Teide.
¿Dónde ver el paisaje lunar?
Hay varias zonas donde puedes ver el paisaje lunar. Por ejemplo, al ascender hasta las Cañadas, en coche por supuesto, a pie es difícil realizar ese recorrido.
También a medio camino del Teide, en el pueblo Vilaflor, que se enorgullece de ser el pueblo más alto de España, y donde vas a disfrutar de un entorno privilegiado pero también algunos que otros “paisajes lunares” solo que pueden pasarte desapercibidos.
Más sitios donde vas a verlos es en el propio Parque Nacional del Teide. Ahí la cosa cambia y si pensabas que era una tontería, que no se veía nada eso te callará. ¿Por qué? Porque mires donde mires vas a ver un paisaje insólito, como si no pudieras creer que eso lo ha hecho la naturaleza.
Y es que si ya las fotografías te dejan sin dar crédito a lo que ves y puedes pensar que el hombre ha tenido que ver para así darle publicidad (no decimos que no pueda ser pero lo dudo, y hay muchos más documentos y paisajes que han sido creado por la naturaleza, caprichosa unas veces, salvaje otras, y tierna en otras). Sin embargo, para los más críticos lo mejor es ir a verlo directamente para quedarte sin palabras.
Además, desde el principio recomiendan que se pasee por el lugar porque tienes zonas que parecen irreales, y de hecho cuando caminas sobre ellas parece que te transportaras a otro sitio diferentes, como si ya no estuvieras en la Tierra. ¿Te das cuenta ahora de por qué lo llaman paisaje lunar?
En el mismo parque puedes hacer un picnic o disfrutar de todo el día. Te permiten llevar comidas y bebidas, es más, son imprescindibles porque es bastante extenso y necesitarás hidratarte y alimentarte, salvo que sea llegar e irte (cosa que no te recomendamos).