Además de ser especialmente nutritiva, la leche de avena es una muy buena alternativa a las de origen vegetal. La leche de avena se produce siguiendo un proceso muy sencillo: basta con unos pocos granos de avena remojados. El resultado del remojo de los granos de avena es el de una leche con un sabor bastante suave que no contiene nada de grasa.
Por eso, es también una gran alternativa a las leches bajas en grasa o desnatadas. El uso de la leche de avena puede ser el mismo que el que se da a otras alternativas conocidas como la leche de soja o la de arroz. En occidente ha cobrado popularidad como un buen tónico para el sistema nervioso. Además, es una gran alternativa para las personas que sufren de intolerancia a la lactosa.
Vitaminas y minerales
Como hemos comentado, una de las grandes ventajas de la leche de avena es su rico contenido nutricional. Se estima que la leche de avena contiene 15 minerales y una alta cantidad de calcio. Una sóla taza de leche de avena nos aportará el 36% de la cantidad diaria recomendada de calcio y un 10% de la dosis diaria recomendada de vitamina A.
Además, la leche de avena es una gran fuente de hierro ya que una taza nos aportará el 10% de la ingesta diaria recomendada. Por lo tanto, estamos ante un alimento muy adecuado para personas vegetarianas que puedan sufrir anemia y estén buscando una fuente con una gran cantidad de minerales.
Rica en calcio y sin lactosa
Llama la atención que la cantidad de calcio que encontramos en la leche de avena es el doble de la que nos aporta un vaso de leche de procedencia animal, en concreto la de vaca. Por lo tanto, estamos hablando de una fuente rica en calcio para gente intolerante a la lactosa. Como sabrás, al ser de origen vegetal, la leche de avena no contiene lactosa.
A pesar de que en el mercado ya encontramos leche tratada a la que se le elimina la lactosa, son cada vez más los usuarios que prefieren pasar a consumir leches alternativas como la de arroz o soja.
Pero si lo que te preocupa también es el bolsillo, debes saber que la leche de avena es una opción muy a tener en cuenta ya que su precio es muy inferior e incluso se puede hacer en casa de una manera muy sencilla.
Baja en grasa
Y todavía hay más ventajas. Si todavía no te hemos convencido de las ventajas de la leche de avena, también debes de saber que la cantidad de grasa que encontramos en una porción es extremadamente baja.
Una taza de leche de avena contiene tan sólo 2,5 gramos de grasa -no saturada-. Si la comparamos con la leche entera de vaca, esta última contendría 8 gramos de grasa de los cuales 5 serían saturadas. Si quieres controlar tu peso, aquí tienes otro punto a favor.
Libre de colesterol
Dado que la leche de avena está hecha a partir de granos de avena y es una opción ideal para vegetarianos, veganos e intolerantes a la lactosa, esta leche no tiene colesterol. Algo que no podemos decir de la leche de procedencia animal.
En definitiva, la leche de avena es una opción ideal si estás barajando una alternativa a las de procedencia animal. Tanto si prefieres una opción más saludable, eres intolerante a la lactosa o vegetariana, la leche de avena es una opción muy a tener en cuenta. ¿Te animas?