El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes el anteproyecto de ley de protección animal, la primera norma en regular a nivel estatal los derechos de los animales para garantizar su bienestar. La ley, impulsada desde el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, llega dos meses después de que el Congreso de los Diputados declarara a todos los animales “seres sintientes” y responde a la “creciente sensibilidad” hacia estos que hay en España, según ha defendido en declaraciones a los medios la ministra Ione Belarra. Estas son algunas de las medidas clave del anteproyecto, que todavía deberá pasar por el Congreso y por el Senado y estará, por tanto, sometida a posibles cambios:
-ANIMALES DE COMPAÑÍA: El texto se centra en los animales de compañía, para los cuales prevé crear un listado positivo en el que se incluirán aquellos animales que cumplan una serie de requisitos, como que sean “fáciles de mantener en cautividad” o que sus alojamientos “reunan las condiciones para que puedan desarrollar adecuadamente sus necesidades fisiológicas, etológicas y ecológicas básicas”.
-ARMONIZACIÓN DE REGULACIÓN: La ley sería la primera en España en proteger los derechos de los animales, y armonizará las diversas iniciativas que se han llevado a cabo desde las comunidades autónomas.
-VENTA DE ANIMALES: Se prohíbe la comercialización de animales en tiendas de mascotas, donde tampoco se podrán exponer al público, y se limita la venta a los criadores profesionales autorizados para la cría; mientras que la cesión de animales entre particulares deberá ser “en todo caso, gratuita y quedar reflejada por contrato”.
-CURSO PARA TENER MASCOTAS: Quienes deseen adoptar o adquirir un animal de compañía, deberán cursar primero una formación en tenencia responsable reglamentada que eduque al potencial dueño en la convivencia que garantice el bienestar del animal.
-MULTAS: El texto fija diferentes niveles de sanción en caso de infracciones: para las leves, la multa podrá ser de entre 600 y 30.000 euros; para las graves, entre 30.001 y 100.000 euros; y, para las muy graves, entre 100.001 y 600.000 euros.
-INHABILITACIÓN: Las personas que vulneren las medidas contempladas en la ley podrán además ser inhabilitados para la tenencia y para las actividades relacionadas con animales (cría, comercialización, asistencia veterinaria, etc) entre cinco y diez años, si la infracción es muy grave.
-FIN A LA EXHIBICIÓN: Se prohíbe la exhibición de animales para fines comerciales, así como su participación de animales en cabalgatas, belenes y procesiones; mientras que se regula su aparición en romerías y ferias y se impone la asistencia en los concursos de, al menos, una persona licenciada o con grado en veterinaria y una persona con titulación de auxiliar veterinario para atender al animal.
-COLONIAS FELINAS: Se reconocen los gatos comunitarios en ciudades y pueblos como colonias felinas que deberán gestionarse de manera ética, responsabilidad que recae sobre los ayuntamientos, si bien las comunidades autónomas deberán establecer protocolos marco.
-SACRIFICIO: Queda absolutamente prohibido el sacrificio de animales de compañía -quedan exluidos, por tanto, los de explotación ganadera-, salvo la eutanasia «justificada bajo criterio y control veterinario con el fin único de evitar su sufrimiento».
-ESPECTÁCULOS TAURINOS: La tauromaquia, al estar protegida a nivel constitucional como patrimonio cultural, no se regula en esta ley.
El Gobierno aprueba la primera ley de derechos de los animales en España
El Gobierno ha aprobado hoy el anteproyecto de ley de protección animal, que contempla prohibir el sacrificio y maltrato de animales y su venta y exposición en tiendas y que exigirá a los nuevos dueños de mascotas haber superado una formación en tenencia responsable, entre otras medidas.
En una sesión extraordinaria celebrada este viernes, el Consejo de Ministros ha dado luz verde al texto que pasará al Congreso de los Diputados para empezar a tramitarlo como futura ley de protección animal, una norma del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 que ha involucrado a otros ministerios como el de Transición Ecológica y el de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Se trata de la primera ley en la historia de España que regula la protección de los animales, según ha explicado la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, quien en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros ha destacado “el maltrato, el abandono y el sacrificio” como las “tres lacras” que vulneran los derechos de estos seres vivos y en las que se centra la futura norma.
Algunas de las medidas que las agrupaciones animalistas han resaltado del texto incluyen la formación que, una vez la ley entre en vigor, será obligatoria para todo el que quiera convivir con un animal, así como el fin de la comercialización y exposición de animales en tiendas de mascotas, y la limitación de la cría, que sólo podrán llevar a cabo criadores profesionales autorizados.
Se prohíbe además el sacrificio de animales, salvo la eutanasia «justificada bajo criterio y control veterinario con el fin único de evitar su sufrimiento», así como el abandono, el maltrato -definido como «toda acción mediante la cual se inflige dolor o sufrimiento a un animal»- y su uso en peleas y en actividades artísticas, turísticas, publicitarias o de mendicidad.
En su intervención, Belarra ha hecho énfasis en que esta ley acaba con el maltrato que ha llegado a ser exhibido en redes sociales, y ha aludido a casos concretos, como por ejemplo un vídeo que meses atrás mostraba a un hombre ahogando a un pequeño jabalí o las imágenes de un zorro calcinado vivo.
Pese a la “creciente sensibilidad hacia los animales”, la ministra ha lamentado que en España “el maltrato a los animales ha gozado prácticamente de una total impunidad”.
Con la futura ley de protección animal quedará también prohibida la participación de animales en belenes, cabalgatas y procesiones y será regulada en otros actos culturales, como romerías y ferias.
El texto fija diferentes niveles de sanción en caso de infracciones: para las leves, la multa podrá ser de entre 600 y 30.000 euros; para las graves, entre 30.001 y 100.000 euros; y, para las muy graves, entre 100.001 y 600.000 euros.
En el caso de los perros, todos serán considerados “de compañía”, si bien los canes «de trabajo» -por ejemplo, los perros guía, policía, de caza o pastores- contarán con disposiciones adicionales que regularán su actividad de forma independiente.
Respecto a las colonias felinas, reconoce la existencia y responsabilidad de cuidar a los gatos comunitarios, cuya gestión «ética» -atención sanitaria o planes de control poblacional- queda bajo competencia de los ayuntamientos, aunque las CCAA deberán generar los protocolos marco.
Esta ley excluirá los espectáculos taurinos previstos en los artículos 2 y 10 de la Ley 10/1991, de 4 de abril.
En paralelo a la norma que hoy recibe luz verde, Belarra ha anunciado una reforma del Código Penal impulsada por la Dirección General de Protección Animal para endurecer las penas por maltrato a 24 meses de prisión con resultado de muerte y a 18 meses si implica atención veterinaria.