Hasta no hace mucho, se creía que un cachorro no podía aprender nada antes de los seis meses, pero esto esta afirmación es completamente errónea ya que con una manera adecuada y refuerzo positivo, es casi limitado lo que un cachorro puede aprender.
Es importante saber que desde el momento que un nuevo integrante cachorro ingresa al hogar, se lo puede educar y adiestrar, de una manera muy común: con un poco de comida. Sumado a esto, es fundamental tener en cuenta que la educación siempre se hará con métodos que sean positivos, esto es muy importante ya que si no se lo educa al cachorro con un método positivo lo único que harás es asustarlo y dañar así la confianza que se tiene con él. Esto es sobre todo porque son muy vulnerables cuando son pequeños, por lo tanto lo idea es que se lo haga siempre a través del juego y con premios como pueden ser la comida. Recuerda que solo se lo debe premiar si está sentado.
También tienes que tener en cuenta que hay un periodo critico que va entre las 8 y 16 semanas donde el perro básicamente aprende muchísimo, ya que su cerebro está más receptivo para todo lo que son nuevos estímulos. Es de suma importancia que el cachorro sepa que esperamos de él, por lo tanto somos nosotros los que le debemos marcar nuestros límites, en definitiva es brindarle una pista de cómo ellos tienen que vivir en nuestra casa y las reglas las marcamos nosotros. Existen cosas que a lo mejor son muy divertidas cuando son pequeños, como por ejemplo que salten, toreen, agarrar zapatillas, etc. Estas se pueden volver en grandes problemas por lo que es muy importante hacerles saber esas cosas. Por lo que no se lo debe sobreproteger al cachorro, y en este tipo de periodos es clave intentar exponerlo progresivamente a toda una seria de estímulos como son los niños, ruidos, personas, por lo que es vital darle el principio de de sociabilización y educación del cachorro, para lograr así que no tenga ningún tipo de miedo y se sienta mucho más seguro.
