Aunque parezca una cosa que carece de importancia, elegir una buena maleta a la hora de viajar, no es sencillo, ya que puede depender de muchos factores. Puede depender de la duración del viaje, del transporte o del destino que hayamos elegido, ya que según sea uno factor u otro una de las primeras cosas que se deben de considerar es que resulte lo más manejable posible, por lo que en un principio, una maleta excesivamente grande o pesada no es muy recomendable. Quizás una buena opción sea repartir el equipaje en dos, pudiendo ser una, una maleta de mano por ejemplo.
Por norma general una maleta rígida puede ser la mejor opción para que el contenido del equipaje llegue sano y salvo a su destino, en especial si se viaja en avión, pues no sueles tener control sobre el trato de la maleta. De esta manera se evitarán que se puedan romper cosas del interior debido a golpes. Para llevar objetos personales, de valor o que revisten mayor importancia se puede escoger añadir la maleta de mano, que puedes llevar en la cabina del avión, bus o tren. No debe de cargarse demasiado, ya que debe de caber en el portaequipaje o debajo del asiento, siempre que no se moleste al pasajero de al lado. Recuerda que esta maleta de mano o bolsa de mano no debe de pesar mucho, ya que dificultaría el embarque o al caer en una turbulencia por ejemplo, lastimarnos a nosotros mismos o al compañero de viaje. Por tanto debe de ser fuerte y ligera. Pero para poder viajar no solo es necesario llevar una buena maleta, sino encontrar buenas ofertas de viajes, ¿no crees?
Si elegimos una maleta blanda resultará ideal para todo tipo de viajes a excepción de los viajes en avión. Tienen la ventaja de que al ser más flexibles siempre nos entrará más equipaje, al contrario de lo que sucede con las maletas rígidas, ya que precisamente al ser más rígidas, es más complicado que nos entre más equipaje de la cuenta. Una ventaja más de las maletas blandas es que vacías suelen pesar bastante menos que las rígidas, por lo que ante un viaje en avión, donde el peso está bastante limitado, gana puntos la maleta blanda, pues las maletas duras pueden pesar vacías hasta cinco kilos, aunque corres el riesgo de que el equipaje llegue deteriorado. Afortunadamente en la actualidad existen maletas mixtas que presentan cierta resistencia al estar confeccionadas con un material endurecido, pero no totalmente rígido, que nos permite cargarla un poco más y tener la certeza de que el equipaje va a estar más protegido que en una maleta blanda. Si por otro lado también quieres hospedarte en hoteles económicos y baratos, y por ejemplo viajas a las Islas Baleares, te recomendamos descubrir la mejor selección de los mejores hoteles en Mallorca. Además, si quieres gastar poco, no olvides de optar por maletas de calidad pero económicas.
Con la finalidad de que sea más sencillo reconocer nuestra maleta es mejor escoger una maleta original y que por su colorido sea fácilmente distinguible entre muchas. Así que es recomendable escoger una maleta llena de colorido. Si ya disponemos de una que no tenga demasiado color, sería conveniente hacerla nuestra poniéndole alguna cinta, pegatinas o chapas que la hiciesen más personalizada. Esto nos facilitará mucho las cosas a la hora de viajar para no confundirnos o que alguien se confunda, ya que no es difícil ver muchas maletas iguales y que la nuestra acabe en manos ajenas por error. En resumen, mejor una maleta rígida o semirrígida con bastante espacio para viajes largos, y una maleta pequeña con varios bolsillos para viajes cortos, siempre pudiendo añadir una maleta o bolso de mano para las dos opciones.